
Soy Ivanka Fernández, y vivo en una ciudad pequeña de Galicia, Lugo. Tengo 40 años.
Mis padres son gallegos y no tengo familia en la antigua Yugoslavia, del que es origen mi nombre. Es una pregunta que me hacen mucho. Pues mis padres fueron muy originales si sobre todo para el lugar en que son origen.
Aunque no tengo vocación profesional, dado a las posibilidades de publicar tus propias historias online me he lanzado. Y aquí estoy escribiendo. Siempre me ha gustado escribir, de hecho durante mis estudios en el instituto hice un pequeño relato que me publicaron se puede decir que esta fue mi primera incursión en el mundo de la escritura.
Para muchos, la escritura se convierte en una pasión, un refugio donde pueden explorar su imaginación y dar vida a sus ideas. Este es mi caso pues me considero una escritora aficionada, pues encuentro en ella una vía de escape, un medio de comunicación y una forma de autoconocimiento.
1. La Llamada de la Escritura
El viaje de un escritor aficionado a menudo comienza de manera inesperada. Puede ser un simple ejercicio en un cuaderno, una carta dirigida a un amigo, o incluso un post en redes sociales que se convierte en un relato más largo. La chispa que enciende la pasión por escribir puede surgir de muchas fuentes: una lectura inspiradora, una película conmovedora, o incluso una experiencia personal que deja una huella profunda. Para muchos, la escritura se convierte en una forma de procesar emociones y experiencias, permitiendo que el dolor, la alegría y la incertidumbre se transformen en palabras.
Esto es lo que me define.
2. La Búsqueda de la Voz Propia
Estoy en la etapa de la búsqueda de su propia voz. La voz es el sello distintivo de un escritor,es decir, la forma en que se expresa y se conecta con su audiencia. A menudo, los escritores principiantes se sienten influenciados por sus autores favoritos y pueden caer en la trampa de imitar estilos ajenos. Pero se que con el tiempo y la práctica, comenzaré mi propio estilo único.
Este proceso puede ser desafiante. La inseguridad y la duda son compañeros constantes en el camino de la escritura. Se que debo aprender a aceptar mis errores, a verlos como oportunidades para crecer y mejorar. Es importante recordar que la práctica hace al maestro, y que cada palabra escrita es un paso más hacia el dominio del arte de contar historias.
3. La Importancia de la Lectura
Para cualquier escritor, la lectura es una herramienta invaluable. Leer no solo enriquece el vocabulario y la gramática, sino que también expande la comprensión de diferentes estilos narrativos y técnicas literarias. Yo como una escritora aficionada debe sumergirme en una variedad de géneros, desde la ficción hasta la poesía, desde el periodismo hasta el ensayo. Cada libro que leía ofrece una nueva perspectiva y puede inspirar nuevas ideas.
Además, la lectura permite me comprender cómo otros autores han abordado temas complejos, cómo han construido sus personajes y cómo han logrado captar la atención de sus lectores. La observación y el análisis de las obras de otros pueden servir como un mapa que me guiará en mi propio viaje creativo.
5. La Comunidad de Escritores
Otro aspecto enriquecedor de mi viaje de escritora aficionada es la posibilidad de formar parte de una comunidad de escritores. Ya sea a través de talleres, grupos de escritura en línea o redes sociales, compartir experiencias y recibir retroalimentación de otros puede ser invaluable. Estas comunidades ofrecen apoyo, inspiración y la oportunidad de aprender de quienes están en una etapa similar del viaje.
La interacción con otros escritores permite el intercambio de ideas, la colaboración en proyectos y la celebración de logros. Además, el feedback constructivo me puede ayudar a identificar áreas de mejora y a fortalecer mis habilidades.
6. La Disciplina y la Persistencia
Escribir requiere disciplina y persistencia. Me enfrento a la difícil tarea de equilibrar mis pasiones con otras responsabilidades, como el trabajo y la vida familiar. Establecer un horario de escritura regular me representa un desafío, pero es crucial para desarrollar el hábito de escribir. Al igual que cualquier otra habilidad, la escritura mejora con la práctica constante.
Debo recordar que la persistencia también es clave en el proceso de superación de bloqueos creativos. Todos los escritores, independientemente de su nivel de experiencia, experimentan momentos en los que las palabras no fluyen. En estos momentos, es importante recordar que la creatividad no siempre sigue un ritmo predecible y que tomarse un descanso o cambiar de enfoque puede ser beneficioso.
7. El Valor de la Crítica
Estoy abierta a la crítica, tanto positiva como negativa, ya que es una parte esencial del crecimiento como escritora. Aprender a recibir y utilizar la crítica constructiva puede ser un desafío, especialmente para los escritores aficionados que como yo, a menudo sienten una conexión emocional con sus obras. Sin embargo, es fundamental entender que la crítica no es un ataque personal, sino una oportunidad para mejorar y evolucionar.
8. La Publicación y la Autoexpresión
Finalmente, muchos escritores aficionados y yo sueñamos con ver nuestras obras publicadas. Aunque la publicación tradicional puede parecer un objetivo lejano, la era digital ha abierto nuevas puertas para la autoexpresión. Plataformas de autopublicación, blogs y redes sociales nos permiten a los escritores compartir nuestro trabajo con el mundo de manera accesible.
Publicar en línea puede ser un primer paso valioso para ganar visibilidad y construir una audiencia. La retroalimentación del público puede ser enriquecedora y motivadora, y cada interacción puede servirme como un impulso para seguir escribiendo y mejorando.
Conclusión
Creo que el viaje de un escritor aficionado es un camino lleno de desafíos y recompensas. A través de la pasión, la disciplina y la comunidad, los escritores pueden descubrir su voz única y compartir sus historias con el mundo. La escritura es una forma poderosa de autoexpresión que no solo enriquece la vida del autor, sino que también tiene el potencial de tocar las vidas de quienes leen sus palabras. Así que te digo que si sientes la llamada de la escritura, no dudes en dar ese primer paso. El mundo necesita más narradores, y tu historia merece ser contada.